Para hablar de la NIKE AIR ZOOM PEGASUS debería ponerme de pie para mostrar el mayor de los respetos porque, como se suele decir, la experiencia es un grado, y en este caso no hay discusión ninguna ya que la PEGASUS, como coloquialmente se le conoce, es uno de los modelos más antiguos y con más versiones que permanecen en la actualidad siguiéndose fabricando, quizás hasta el más longevo (desconozco el dato con exactitud), desde que naciera allá por el año 1983 y haya llegado hasta nuestros días con la trigésimo primera versión.
En cuanto a lo que se refiere a mi historia con las Pegasus, fue mi segundo modelo “serio” de running adquiriendo la versión 24 a principios del año 2009. En aquel momento no fue una zapatilla que me llamara nada la atención más allá de su comodidad, aunque en aquellos tiempos la bestia freaky coleccionadora y probadora de zapatillas de running aún no había despertado. Se puede decir que fue una de las primeras zapas que me desvirgó en este mundo runner.
Mi siguiente experiencia con las Pegasus fue ya con la versión 28 allá por el año 2012, coincidiendo con mi mejor año en cuanto a rendimiento deportivo, y fue una zapatilla que me encantó, tanto es así que no pude dejar escapar un ofertón y adquirí un segundo par cuando aún le quedaban muchos kilómetros de vida al primer par de pegasus 28 que adquirí. La usaba para todo de lo satisfecho que las llevaba, tanto para rodajes como para los míticos sábados de entrenamiento cañero a las 8:00 de la mañana con mi antiguo club Runnersworld Valencia, habiendo hecho con ellas las mejores series de 1.000, 2.000 y 3.000 por la zona del Parque de Cabecera del antiguo cauce del río Turia.
De ahí salté a las Pegasus 30 que me trajeron Sus Majestades Los Reyes Magos de Oriente las Navidades de 2013/2014, zapatilla comodísima e ideal de cara a hacer kilómetros y kilómetros de rodaje, pero que para mi gusto había perdido ese “punch” o chispa para hacer series que yo sí notaba en la versión 28.
 |
| Nike Air Zoom Pegasus 31 |
Y por fin llego a la actualidad, a la zapatilla objeto de mi run test experience, la NIKE AIRZOOM PEGASUS 31, modelo que ha dado un salto cualitativo importante. Se trata sin duda de la Pegasus más dinámica y reactiva, ya que ha dejado de tener ese tacto extremadamente blando o “chicle” del que se quejaba algunos usuarios que decían que se “hundían en ella” (sí que tenían una amortiguación muy agradable pero yo nunca la he sentido tan exagerada, aunque en mi defensa he de decir que soy de los que les gusta el tacto blando), y también ha dejado de ser una zapatilla exclusivamente talonadora, siendo ahora un modelo que además de poder entrar de talón, también favorece, o mejor dicho, que también es apta para correr entrando de mediopié o antepié.
A esta gran mejora en la dinámica de la pisada y su transición, junto con el tipo de de amortiguación que me seduce (suave, reactiva y efectiva), se le ha suman los puntos fuertes (y mejorados) que siempre han caracterizado a los últimos modelos de Pegasus, que son un muy buen ajuste y un excelente confort(es una zapa muy cómoda), además de tener un peso muy competitivo, lo cual ha hecho que se convierta en una de mis zapatillas de entrenamiento favoritas y fijas en mi rotación semanal (una más de mis frikadas es que raro es que en una semana repita zapas).
Todas estas propiedades que he mencionado le dotan a la Pegasus 31 del carácter de valor seguro en el momento de elegir unas zapas para entrenar, especialmente ideal para aquellos días que tengo un rodaje largo en teoría “tranquilo”, pero que sabiendo el “grupeto” que hemos quedado para correr y las “personalidades” que lo forman, se sabe que en cualquier momento se puede calentar el rodaje y desatar las hostilidades, y más aún si alguno de los componentes muestra debilidad!!!
Como muestra de la gran zapa que son es que con ellas hice la mayor parte de los largos de preparación para la Maratón de Valencia 2014, y su resultado fue tan satisfactorio que dudé en si ponérmelas para el GRAN DÍA, aunque finalmente me decidí por las Adidas Energy Boost 2.
 |
| Nike Air Zoom Pegasus 31 |
Pero si mi experiencia personal no basta, señalar que el icono de las NIKE AIR ZOOM PEGASUS 31 es nada más y nada menos que el atleta británico Mo Farah(creo que este grandísimo campeón no necesita presentaciones, y menos para Fabián Roncero, pero si alguien no lo conoce pinchad aquí). Y no se trata solo de que es la imagen, no, sino que es usuario habitual de este modelo desde hace ya unos años, y para comprobarlo solo tienes que estar un poco enfermo por este deporte y comprobarlo en su página personal de Facebook o Twitter. Para un enfermo seguidor como yo del team Nike Oregon Project, este dato dice muchísimo!
Y por si fuera poco, a todo esto se le suma múltiples combinaciones de colores(desde las más sobrias y serias hasta las más llamativas y estrambóticas), ediciones especiales de tiendas especializadas en running(las mías), y hasta la edición Mo Farah/Oregon Project con la que él entrena (la calavera símbolo de su equipo Nike Oregon Project en la lengüeta, y MOBOT reflectante en la zona posterior) OH MY GOD! Y si quieres más dulce pues toma más azúcar pues hay que añadir que tienen un precio muy competitivo (es el primer precio de Nike de zapas serias de entrenamiento de running) pudiendo encontrarlas habitualmente a un mejor precio todavía (consecuencia de que constantemente saquen colores nuevos).
¿Cuál es el perfil de usuario? Pues aunque esto es algo subjetivo debido a las propiedades de comodín de este modelo, yo diría que es ideal para corredores de pisada neutra de menos de 75kg cuyo ritmo oscile entre 4:00 min/km hacia arriba casi sin límite. Para los corredores de mayor peso por precaución sí que limitaría su uso a un ritmo no superior a 5:15 min/km. En cuanto a distancia, para estos tipos de usuario, no veo problemas en que sea la zapatilla habitual de rodaje(y para el tipo de entrenamiento que sea) si se adapta a nuestros gustos, perfecta por ello para el gran día de la maratón, aunque personalmente, si el peso ronda los 80 kilos y el ritmo está por encima de 5:15 elegiría otro modelo.
Tecnología de la NIKE AIR ZOOM PEGASUS 31:
- UNIDAD
NIKE ZOOM AIR: La unidad Nike Zoom Air en el talón consigue una amortiguación de perfil
bajo con una elevada capacidad de respuesta. Se han actualizado para
acercar la unidad al pie y, de esta forma, conseguir una amortiguación
mejorada desde el principio hasta el final de la carrera.
- PARTE
SUPERIOR ENGINEERED
MESH: Los
elementos están perfectamente integrados, sin
costuras, lo que reduce el roce y el peso, mientras se proporciona una mayor sujeción al pie. Además, la
ventilación contribuye a mantener los pies frescos cuando más se
necesita.
- CRASH
RAIL: Para proporcionar transiciones más suaves, se ha añadido un riel
articulado de caucho a la suela exterior lateral, lo que proporciona una
pisada más ancha que estabiliza el pie desde el impacto contra el suelo
hasta el despegue.
- DROP DE 10 MM: El drop entre el talón y la puntera se reduce en 2 mm para proporcionar una pisada más natural.
- MÁS DETALLES DEL PRODUCTO:
- Material reflectante bajo el empeine para aumentar la visibilidad en condiciones de poca luz.
- Espuma Cushlon de alta calidad para una amortiguación y sujeción suave pero firme.
- El contratacón interno envuelve el pie para un ajuste ceñido y seguro.
- Suela exterior tipo gofre con caucho respetuoso con el medio ambiente
para ofrecer durabilidad y una tracción excepcional en varias
superficies.
- Peso: 312 gramos (para un número 43 de hombre) (he leído en otras páginas que el peso es menor de 300 gramos para la misma talla).
Y tras enumerar las propiedades de esta gran zapa, finalizo así este run test experience sentándome al acabar de escribir. AVE PEGASUS!
